Pablo Sánchez Garrido y María Ángeles Varela Olea lideran un proyecto de la Universidad San Pablo CEU para localizar el cuerpo del dramaturgo, que supuestamente se esconde tras los muros de Nuestra Señora de los Dolores.

Pedro Calderón de la Barca (1600-1681), cuyos restos mortales tuvieron una vida azarosa y trágica, a vueltas por Madrid, y que hasta ahora se creían ceniza, polvo, nada.
—Los restos de Calderón no han desaparecido.
Lo enterraron primero en la iglesia de San Salvador, tal y como él había dejado por escrito. En 1842, sin embargo, el mal estado de ese edificio obligó a que sus restos fueran trasladados al cementerio de la Sacramental de San Nicolás, donde permanecieron 29 años.